Los criminales que entraran en el cielo


Las religiones nos han metido en la cabeza que personas malas no pueden ir al cielo, por eso más de uno está convencido de esta falsa doctrina. Cuando hablamos que las personas deben tener cierto estándar de conducta para hacer parte del reino de Dios, estamos declarando que la salvación de un ser humano depende de su decisión o acción, lo cual nos pone en la senda del Universalismo o Catolicismo, doctrina que pregona que todo ser humano puede ir al cielo mientras haya tenido una vida piadosa en la tierra.

Para desmentir esta falsa doctrina, lo primero que tengo que decir es que el cristianismo no es conductivismo, esto no quiere decir que a Dios le guste que sus hijos hagan cosas malas, es claro que el Espíritu Santo esta en contra de los malos comportamientos y deseos de los hombres, en el libro de Gálatas 5:16-17 (TLA) se nos dice: “Por eso les digo: obedezcan al Espíritu de Dios, y así no desearán hacer lo malo. Porque los malos deseos están en contra de lo que quiere el Espíritu de Dios, y el Espíritu está en contra de los malos deseos. Por lo tanto, ustedes no pueden hacer lo que se les antoje.”

Pero, aunque a Dios no le gusta que su pueblo practique el mal también es una realidad bíblica que nadie va al cielo por portarse bien. La verdadera doctrina de la salvación es que las puertas del cielo se abren para una persona sencillamente porque tuvo fe en Cristo (Juan 3:16) y esta fe la obtuvo porque Dios lo escogió antes de la creación del mundo como dice Romanos 8:28-30:

Sabemos que Dios va preparando todo para el bien de los que lo aman, es decir, de los que él ha llamado de acuerdo con su plan. Desde el principio, Dios ya sabía a quiénes iba a elegir, y ya había decidido que fueran semejantes a su Hijo, para que éste sea el Hijo mayor. A los que él ya había elegido, los llamó; y a los que llamó también los aceptó; y a los que aceptó les dio un lugar de honor.” (Romanos 8:28-30)

O la porción de Juan 1:11-13 (TLA) donde se nos dice que la decisión por Cristo es por voluntad de Dios, miremos el texto: “La Palabra vino a vivir a este mundo, pero su pueblo no la aceptó. Pero aquellos que la aceptaron y creyeron en ella, llegaron a ser hijos de Dios. Son hijos de Dios por voluntad divina, no por voluntad humana.”

Ahora con todo este argumento me hago la pregunta ¿Existirán súper malhechores que entraron o entraran al cielo? La respuesta es contundente “Claro que si” pero en algún momento de su vida lo cual pudo ser un instante antes de su muerte el designio eterno de Dios para ellos se cumple, en palabras más sencillas “se arrepintieron y se convirtieron en algún instante de su existencia terrena por la operación del Espíritu Santo de Dios”. Lo único cierto es que en el cielo no entra personas que no se hayan arrepentido, todos los que llegan es porque Dios los escogió y por ende se arrepienten aceptando a Cristo en sus vidas como su Dios y salvador.

Entonces por ejemplo un súper asesino ingresa al cielo si la operación de Dios ocurre en este, lo que puede suceder es que no nos dimos cuenta en que momento sucedió, porque pudo ser instantes antes de morir o después que sucedió, tal vez no le volvimos a ver en nuestras vidas.

Miremos un ejemplo bíblico sobre esto, el malhechor que murió a lado de Cristo era un criminal en la TLA Lucas 23:39 dice: “Uno de los criminales que estaban clavados junto a Jesús también lo insultaba” fíjese que en esta traducción bíblica les llama Criminal a los que estaban a lado de Cristo en la cruz, la palabra crimen para la real academia de la lengua española se refiere a la acción voluntaria de matar o herir gravemente a alguien. Si lees todo el texto de Lucas 23 te dará cuenta que uno de estos criminales se arrepiente al punto de declarar que Cristo posee un reino, que es lo mismo que declararlo rey. Pregunto ¿Entro o no este malhechor al reino? “Claro que si” en ese mismo texto Cristo se lo declara cuando le dice “De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso” (Lucas 23:43).

Tal vez usted me diga ¿cómo es posible eso? Bueno es posible porque Dios es soberano, el hizo el universo, abrió el mar rojo en dos, sanó enfermos, revivió muertos, para Él nada es imposible, Dios pudo escoger al peor malvado de la historia para su reino, pero también planeo que este se arrepintiera en vida, creyera en Cristo y disfrutara de su gloria de igual forma que cualquier creyente piadoso.

Hay una parábola de Cristo llamado la parábola de los obreros de la viña, la cual está escrita en evangelio de Mateo 20, en esta parábola el dueño de la viña contrata obreros a diferentes horas del día, pero cuando llega el fin de la jornada a todos le paga por igual porque así fue el acuerdo al momento de la contratación. Eso nos muestra que algunos se arrepentirán más temprano que otros, pero al final el premio o la recompensa será la misma, por eso en el cielo no tendrán más gloria un creyente que otro y aunque la biblia también nos habla de que habrá coronas por recompensa de vida, estas terminaran a los pies de Cristo porque Él es el verdadero ganador.

Para terminar solo le quiero decir que en el cielo habrá sorpresas, tal vez el más perverso de los hombres por obra del Espíritu Santo disfrutara de la gloria de Cristo y de igual forma tal vez también el más piadoso, bueno y bondadoso disfrutara su eternidad en el caluroso infierno hecho para satanás y sus ángeles. Así que le recomiendo no juzgar, porque no sabemos como opera Dios en cada ser humano.

Que Dios le bendiga

Nelson Vergara