Cuando Facebook se volvió necio


Recordando lo que dice Romanos 12:2 hago una reflexión sobre la red social Facebook, en la cual en el año 2007 pude abrir mi cuenta, esta para aquel entonces tenía tres años de haber sido inaugurada, eso quiere decir que hoy tengo 9 años de estar metido en esta red social. Al principio la usamos para comunicarnos y jugar un poco, recuerdo que queríamos tener el mejor puntaje en los juegos que esta proponía y lograr poseer la mayor cantidad de amigo posibles, para así poder saber más sobre ellos, ósea chismear un poco.

Parecía algo sin trascendencia y lo veíamos como una herramienta muy útil para comunicarnos y relacionarnos con otros, era también el tiempo de Messeger de Hotmail el cual, en la empresa que trabajaba se usó mucho para comunicarnos rápidamente y conocer el estado de los procesos logísticos que llevábamos acabo, lamentablemente whatsApp aun no hacia su aparición, pues tampoco existían los móviles que hoy poseemos.

Pero Facebook ha mutado y hoy es el escenario de una cantidad de información que podríamos llamar aberrante, debido a que lo social casi que ha desaparecido y se ha convertido en una plataforma donde se exponen las posiciones a favor y en contra de temas como la política, en especial las lucha entre la izquierda y la derecha latinoamericana, y muchos ejemplos de la miseria o desgracias humana, que de vez de entretenernos lo que hacen es estresarnos, y en la mayoría de los casos desinformarnos.

Como están las cosas pienso en lo personal que cada día lo mejor es estar lo menos posible en Facebook, porque no renueva nuestra mente para conocer la voluntad de Dios, lo que es bueno, aceptable y perfecto, más bien genera un deterioro constante nuestra calidad de pensamiento. Por otro lado, en Facebook pareciera que todos tuvieran razón y se está volviendo el Bronx de la internet, donde las masas acuden a fumarse su opio para ver como tranquilizan su mente, pero cuando termina y le dan salir, lo que queda es una sensación de miseria humana indescriptible.

Yiye Avila un pastor pentecostal muy famoso en Latinoamérica, dijo que la televisión era el cajón del diablo, creo que este hombre murió si dimensionar la realidad de lo que dijo, muchos pensaron que se arrepintió de lo que dijo pues tuvo un programa de televisión, pero creo que lo que dijo, aunque se hubiera arrepentido después, es una gran verdad que ocultarla seria como querer tapar el cielo con las manos. Lo cierto es que mientras no hubo internet la televisión genero más desgracia que cultura o buenos hábitos, de igual forma Facebook está siendo la mejor alternativa de crear mentes torcidas y dispuesta a difamar, mal entender y manipular si es el caso, a todo el que se le atraviese.

Facebook paso de ganar 2804 millones de dólares en el 2014 a ganar 6240 millones de dólares en el 2015, ósea que aumento sus ganancias en un 220% aproximadamente, esperemos a ver cómo termina el 2016, creo que muy por encima del 2015.  Lo anterior me da pie para cuestionarme ¿Cuál es la verdadera misión de Facebook? Porque la que tienen reza “Hacer que las personas puedan compartir y hacer del mundo un lugar más abierto y conectado”.

No sé, pero un mundo más abierto ¿qué significa? ¿Sera que tiene relación con la perversa ideología de la mente abierta que tanto daño a causado a la humanidad? Pero la realidad es que Facebook necesita que las personas publiquen la mayor cantidad de porquería en el menor tiempo posible y mantener a más de uno sin criterio en el pimpón de la vida.

Para concluir creo que no es sano pasar mucho tiempo en Facebook como ya dije, no quiero tampoco decir que lo dejemos por completo, más bien que tengamos cuidado con lo que vemos y escuchamos en esta red, para que no nos ocurra lo que le ha acontecido a más de uno, que después de llenar su mente de tanta basura terminaron cogiendo carretera (Termino usado en la costa atlántica colombiana, para decir que una persona se volvió loca) dando razón a lo que la Biblia nos enseña cuando en Eclesiastés 1:8  dice “que el ojo no se sacia de ver, ni se cansa el oído de oír” .

Que Dios te bendiga

Por: Nelson Vergara