El texto es 1 Samuel 28:3-25 donde se narra que el profeta Samuel había muerto y el pueblo estaba dolido por esto, adicionalmente los filisteos estaban al asecho, y el rey de Israel que era Saúl, temblaba de miedo al ver que este ejercito enemigo se le venia encima.
Saúl entonces buscó a Dios, pero al no tener contestación de Él, ni por sueños, ni por Urim (Elementos del pectoral que usaba el Sumo Sacerdote judío que se utilizaban para consultar a Dios sobre cuestiones importantes), ni por profetas, dijo a sus criados que buscaran una mujer que tuviera un espíritu de adivinación para que por medio de ella consultar a quién el dijere.
Los siervos de Saúl encontraron una mujer en Endor, y seguramente la búsqueda no fue tan sencilla porque Saúl había desterrado a los brujos y hechicero de todos los territorios de Israel. Entonces Saúl disfrazado para no ser reconocido fue donde esta bruja, y pidió que le hiciera venir el espíritu de Samuel. Para no alargar la historia, Samuel aparece y lo que le dice es que él y sus hijos morirán al otro día, pues Dios le dará la victoria a los filisteos y el reino a David.
Es claro que lo que hizo Saúl de ir a consultar a una bruja enojó más a Dios, y la derrota y muerte sin par le vendría al otro día a Saúl, como indefectiblemente sucedió. Hoy como dije al principio muchas personas buscan a los brujos, creen que el poder del mal les traerá bien, piensan que si una bruja ataca con demonios a otra persona ellos gozaran de ese triunfo sin que no les pase nada.
La realidad es otra, he visto en mi vida que todas las personas que han usado a los brujos el fin es el mismo que el del brujo, terminan en la miseria, acabados, destruidos, burlados y muchas veces muertos con enfermedades o situaciones inesperadas. Es muy visible que el poder de Dios viene del cielo y destruye a todo aquel que busca a satanás como su aliado, por eso la Biblia dice en Romanos 1:18 “Porque la ira de Dios se revela desde el cielo contra toda impiedad e injusticia de los hombres que detienen con injusticia la verdad.”
Si en alguna ocasión has pecado consultando a un brujo o pidiendo que este con su poder oscuro ataque a otra persona, lo que te puedo recomendar es que te arrepientas, le pidas perdón a Dios y andes en sus caminos, debido a que estas acciones no son pecados imperdonables, Dios tiene misericordia y hasta a los mismos brujos los perdonas si se arrepienten. Pero recuerda que, con la brujería y el demonio nunca tendrás la victoria, nunca disfrutarás de las bondades de Dios y lo más seguro es que tu vida sea tan desgraciada que no la puedas soportar.
Que Dios me los bendiga.
Nelson Vergara
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