Mi bebé el perro

En la conferencia “Muestra Cristo 2023” el pastor John Onwuchekwa disertó sobre el lado feo del dinero, basado en el texto de Eclesiastés 5:10-6. Pero casi terminando la conferencia dio un testimonio sobre que, su esposa y el adoptaron a un perrito. El perrito no se acomodó a ellos según lo que cuenta el pastor, hacía muchas travesuras, tenía un carácter dominante y en fin, los llevó a que lo devolvieran a la perrera de donde lo habían solicitado.

Pero lo más curioso del asunto fue que, cuando el pastor John Onwuchekwa dijo que habían devuelto el perro todo el auditorio hizo un quejido de dolor o lástima. Creo que las personas que asistieron a dicha conferencia debían ser cristianas, eso creo, pero al tocar el punto, parece que a todos les dolió mucho dicha acción.

No puedo juzgar tan directamente lo ocurrido, pero lo cierto es que en el mundo actual la filosofía animalista nos ha introducido una idolatría hacia los animales como si estos fueran seres humanos. Sabemos también que esa filosofía es contraria al cristianismo, y en realidad lo que busca es igualar a los animales con el hombre al punto que, si alguien se le ocurre tener una relación matrimonial y sexual con un animal, lo podría hacer sin ninguna dificultad, y no nos extrañemos que hasta lo bendiga la iglesia.

En días pasados en el barrio donde resido en la ciudad de Bogotá, por el grupo de WhatsApp denunciaron mediante fotos a una propietaria de unos perros, que había permitido que estos montaran a una pequeña perrita. La propietaria contestó un poco indignada por el hecho, porque ella era veterinaria y sabía lo que está ocurriendo explicando que es natural que los perros  realicen estas acción no solo para copular sino también para jugar, y que ella estaba segura de que en ese episodio no era para aparearse sino solo para jugar porque sencillamente la perrita no estaba en calor.

Bueno, lo anterior para las personas que pasaron las fotos por WhatsApp, era como si los perros estuvieran violando a la perrita, y lo veían como si dos hombres fornidos cogieran a una niña pequeña y la violentaran sexualmente. Por otro lado, en el mismo grupo del barrio, una persona que tiene como labor profesional pasear perros diariamente, también se quejó que se estaba ocupando la cancha de tenis para practicar dicho deporte y que esa cancha era para que los perros se divirtieran. Claro está, de inmediato muchos vecinos le respondieron que ese escenario era para el tenis no para los perros.

En Colosenses 2:8 la palabra de Dios nos enseña: “Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, y no según Cristo.” Ciertamente las nuevas filosofías han llevado a la sociedad actual a considerar los animales en especial a los perros como si fueran seres humanos, pero se nos olvida que son criaturas que Dios creó para el servicio del hombre y en especial los perros. En los años 70, 80 y 90 los perros eran más tratados como un compañero para cuidar la casa, pero después de la caída de las torres gemela parece que todo cambió.

Con lo anterior no estoy motivando al desprecio o maltrato animal en especial a los perros, más bien les estoy invitando a que tengan una óptica correcta, para que pueda diferenciar quien es el animal y quienes somos los seres humanos, porque como van las cosas no pasará mucho tiempo en que tendremos familias multiespecies, socavando así la obra del Señor. 

Que Dios les bendiga.

Nelson Vergara

Comentarios