Si leemos este pasaje de Mateo 24 y deducimos que la
salvación se pierde por la falta de cumplir la ley de Dios mediante el esfuerzo
propio de los cristianos o santos, entonces estamos declarando que la obra
salvífica de Cristo no fue por gracia, sino por obras, porque aparte del
sacrificio del Señor en la cruz, se necesita un adicional que es, que los hijos
de Dios guarden sus mandamientos.
El problema de la salvación por obra es que, si para ir al
cielo necesitamos que los hijos de Dios guarden sus mandamientos, entonces
nadie entrará en la gloria del Señor, porque como cristianos no llegamos a
cumplir nunca con el total de los mandamientos de Dios, y sabemos todos por los
relatos bíblicos que la ley de Dios fue algo incumplible para Israel y de igual
forma para los demás seres humano.
Entonces ¿A qué se refiere la perseverancia de los santos?
La perseverancia de los santos es la actitud que tienen los escogidos generada
por la misma operación de Dios. Esto quiere decir que todo aquel que es un
auténtico cristiano su vida será Cristo céntrica, no por él sino por la obra
que Dios hace sobre él. Un auténtico cristiano que fue escogido desde antes de
la creación del mundo, responderá al llamado del Padre en su vida, estará
siempre viviendo su vida para el evangelio de Cristo y aunque el pecado siempre
lo estará tentando y en algunas caerá, volverá arrepentido al padre sin
dudarlo.
Cuando se habla de la perseverancia de los hijos de Dios, no
quiere decir que serán perfectos en sus vidas en lo relacionado con conducta y
cumplimiento con los hábitos cristianos, lo que indica la perseverancia de los
santos es que, el poder de Dios siempre los tendrá cubiertos para que no fallen
y si fallan se volverán al padre en arrepentimiento como ya mencioné, siendo la
caída un acto permitido por Dios con algún propósito en especial.
Pero tal vez usted preguntará por las personas que han
asistido a la iglesia y se han apartado, en este sentido puedo responder lo que
R.C. Sproul dijo en una de sus conferencias “Los que tienen realmente la
salvación de Dios nunca la pierden, pero lo que la pierden es porque nunca la
han tenido.” Esto nos lleva a declarar que la salvación solo se pierde en
aquellos que no fueron escogidos, los cuales nunca degustaron del don
celestial, y la perdieron antes de la creación del mundo cuando Dios no los
escogió para salvación. Por eso todo escogido perseverara hasta el fin de su
vida indefectiblemente.
Bendiciones
Nelson Vergara
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