¿Usar tarjetas de créditos es pecado?

 

Las tarjetas de crédito se cree que fueron creadas por la empresa Western Unión en el año 1914, esta las creo para una clientela elite que podría tener acceso a prestamos preferentes. Mas tarde en 1924 empresas como la General Petroleum y varios hoteles americanos implementaron tarjetas de créditos para el uso de sus clientelas.

Pero las tarjetas como la conocemos hoy nacieron realmente en 1950 cuando Frank McNamara, director de la Hamilton Credit Corporation ingreso a un restaurante para comer con unos amigos, y a la hora de pagar se dio cuenta que había dejado su dinero en casa, por lo cual vino a su mente la idea de una tarjeta para que no le pasara a más nadie lo que le había sucedido a él, ya que sintió gran vergüenza con sus acompañantes y con el restaurante donde lo conocían.

McNamara creo entonces la primera tarjeta en 1950, la cual se llamó “Diners Club.” Desde entonces muchas personas usan las tarjetas de créditos, al punto que al final de ese mismo año mas de veinte mil personas dentro de los Estados Unidos ya hacían uso de estas. El auge del uso del crédito plástico como se le conoce popularmente, ha sido tal que, solo en nuestra nación Colombia en enero del año 2020 existían más 16 de millones de tarjetas vigentes en manos de 6.5 millones de personas, lo que da un promedio de 2.46 tarjeta por personas aproximadamente, y donde se encontró que el 51% eran mujeres. También se conoce que el gran porcentaje de personas en Colombia que poseen tarjetas sus edades están entre los 26 a los 65 años. Y aunque este dato de Colombia podría abrumarnos la realidad es que es muy bajo en comparación con otras naciones.

Esto se volvió una cultura, hoy las ofrecen por todos lados, mas si el sistema reconoce que la persona ha sido fiel pagador o tiene capacidad financiera y no se ha endeudado. Por otro lado, el sistema también esta lleno de deudores por doquier, generando así pobreza y dolor en muchos.   

Pero ¿Sera que un cristiano debe usar este tipo de crédito? ¿Puede ser pecado su uso? Expertos creen que las tarjetas de créditos no son malas por si misma, lo malo según ellos es el mal uso de estas, y recomiendan que las personas no abusen, por ejemplo, no tener mas de una tarjeta de crédito, que el cupo no sea superior al ingreso de la persona, que todas las compras que se hagan sean a una sola cuota, que no se haga avances con ellas y que lo que se compre sea solo para casos de emergencia o vital.

Lamentablemente muchas veces hemos abusado de las tarjetas de crédito y nos ha llevado a un déficit financiero personal. Puedo hablar con propiedad de esto, debido a que durante años hice mal uso de tarjetas de créditos que me otorgaron los bancos y algunos almacenes de cadena. Llego el momento que se me hizo imposible soportar hasta el pago mínimo, esto me llevo a que tuviera que buscar la ayuda de un reparador de deudas, el cual nos obliga hacer un ahorro mensual mientras se deteriora nuestro crédito para finalmente negociar con un descuento considerable.

Aunque he conocido personas que me han dicho que saben usar las tarjetas de créditos, tal vez por mi experiencia estoy convencido que nadie realmente le da buen uso a estas y segundo son productos de bancos que saben hacer sus tramas para que la población más vulnerable caiga en sus redes y necesite tarde o temprano usarlas o más bien mal usarlas.

Ahora, considero que el uso de las tarjetas siempre es malo, perdóneme si no está de acuerdo conmigo, pero generalmente lo que adquirimos con estas son productos o servicios que no podemos hacerlo con el dinero que ganamos, eso indica que estamos declarando al cielo que la provisión que Dios nos envía no es suficiente y debemos endeudarnos. Por otra parte, no estamos escuchando la voz de Dios, sencillamente porque si Él nos manda una provisión para vivir, debemos contentarnos con esta y si no alcanza para comprar lo que deseamos, lo mas seguro es que Dios nos esté diciendo “No lo compres” es allí donde llega el pecado porque desobedecemos a Dios indefectiblemente.

Si nos vamos a la palabra nos encontramos que en Proverbios 10:22 se nos dice que la bendición de Dios enriquece y no añade con ella tristeza. Si usted analiza las tarjetas de créditos, primero no enriquecen a nadie y segundo la tristeza que traen es grande cuando la persona queda insolvente por el mal uso de estas (Que es casi siempre).

Hoy por mi parte cancele toda tarjeta de crédito y estoy pagando al reparador la cuota de abono como ya dije. Realmente un cristiano no debiera caer esto, es terrible y nefasto, no es una bendición de Dios el que un banco nos de una tarjeta, esta nos acorralara tarde o temprano y terminaremos pagándole al sistema intereses, cuotas de manejos y conociéndonos como nos conocemos endeudándonos por más de un placer que deseamos saciar urgentemente.

Para terminar solo te recomiendo que no tengas tarjetas de crédito, vive con lo que ganas y sino tienes no compres, tampoco caigas en corrupción por desear tener lo que no puedes, Dios te ha dado una vida y lo que has conseguido de forma ilegal o pecaminosa es porque no te corresponde y te va a traer mal, pues los pecados del hombre y su maldad siempre lo alcanzarán (Números 32:23).

Que Dios le bendiga.

Nelson Vergara

Comentarios