La biblia nos enseña en Job 5:18
que “Dios hiere, pero cura la herida; Dios golpea, pero alivia el dolor.” Después
de esta pandemia podremos ver aun mas la mano de Dios en lo que ocurrió, tal
vez ahora aun es muy prematuro para dar un dictamen de lo que Dios esta haciendo,
pero hay muchas conclusiones que podemos sacar, la primera que detrás de
d esta indefectiblemente Dios y que detrás de la sanidad de los
pueblos y la vacuna que aparecerá también estará Dios.
Ahora, aunque estemos en medio de
la tormenta debemos estar calmados. Recuerdo el pasaje de Cristo en la barca
con sus discípulos (Mateo 8:23-27, Lucas 8:22-25) donde Dios permite una tormenta
tenebrosa que genero el pánico colectivo en ellos, pero lo mas precioso del
tema es que Jesus dormía cuando esto ocurría, como diciendo ¿Cuál es el miedo? Los
discípulos seguramente se asombraron al verle dormir tan plácidamente en medio
de la situación, ellos corrieron lo despertaron y este se levanto dio una orden
al viento y a las olas, y todo se calmó. Pero vino la pregunta a sus discípulos
¿Qué paso con su fe?
¿Tenemos fe? Claro que sí,
entonces estemos confiados que, aunque enfermemos Dios hará lo mejor para
nosotros. Pero usted me dirá: “es que yo no quiero que haga lo mejor para mí,
yo lo que quiero es que no me deje morir”. Siempre hemos querido tener a Dios como si
fuera nuestro Genio de la lampara de Aladino, queremos que Él haga lo que
deseamos, por eso muchos oran pidiendo algo, Dios mira el corazón y no les da
eso, porque en esas oraciones hay algo que satisface más al ego del hombre que a
la gloria de Dios.
Para la muestra un botón, he
conocido muchos ministros del evangelio que oran por años tener una mega-iglesia,
me pregunto ¿Para qué? ¿Quién les metió en la cabeza que esa es la fórmula del éxito
eclesiástico? He llegado a la conclusión que muchos lo hacen porque ven en una
mega-iglesia mucho dinero circulante, por eso Dios generalmente responde a esta
petición con un simple “NO” y en la práctica usted vera que por mucho que estos
ministros oren, hagan estrategia y cualquier maroma espiritual su iglesia sigue
con la misma membresía o menos.
Cristo oraba y el padre respondía
de inmediato ¿Por qué? ¿Por qué era Dios?, la respuesta es NO, Dios padre respondía
a su hijo porque sus voluntades son la misma, eso nos deja claro que Dios responderá
a nuestros deseos solo cuando estos estén alineados a su voluntad. Si usted
estudia la vida de Cristo, nunca pido poder, nunca pidió dinero, nunca se quejo
es mas en Mateo 8:20 lo vemos declarando “Las zorras tienen cuevas y las aves
tienen nidos, pero yo, el Hijo del hombre, no tengo un lugar donde descansar.”
(TLA).
Entonces ¿será que la voluntad de
Dios es que no seamos tocado por el coronavirus?, seguramente, porque Dios es
sanador, y si permite que nos enfermemos Él decidirá quien vive y quien no vive,
los cristianos que vivan seguirán en la vida y deben tomar la experiencia para
mejorar más en la comunión y la propagación del reino en esta tierra, los
cristianos que mueran habrán vuelto a casa donde el Padre los espera con los
brazos abiertos y experimentaran lo que todo ser humano desearía si tuviera la oportunidad
previa de conocerla, y es la gloria de Dios. Pablo dijo a los Filipenses “Porque
para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia.” (Filipenses 1:21).
Para concluir puedo decir que el
coronavirus pasara, Dios se encargara de eso, adicionalmente Dios se encargara
de cada ser humano y el determinara cual será su suerte, y si eres del pueblo de
Cristo solo nos queda orar y esperar la decisión que no es otra que la misma decisión
de vida o muerte que tenemos con Dios desde que llegamos a esta tierra (1
Samuel 2:6-8).
Dios le bendiga
Nelson Vergara
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