El ser humano por lo general cree tener el
poder de ocultar las cosas, cuando un ser humano hace algo que es malo muy rara
vez lo proclama, siempre trata de ocultarlo por miedo a la sociedad o a la
justicia humana.
Hoy vemos como la corrupción se ha adueñado tanto de las entidades gubernamentales como de las empresas privadas. Parece inverosímil, pero hoy la prosperidad económica está más en las manos de los que practican corrupción que en las personas que son honestas y de vidas decorosas.
Está tan dañada la mente del ser humano que los políticos de nuestros tiempos siempre van pensando en robar para enriquecerse y si no se comprometen con esto, sencillamente no ocupan la curul o el cargo al cual aspiran. Pero el gran problema del ser humano es que no se acuerda que su vida terminara en un juicio. La biblia proclama esta verdad en Hebreos 9:27 donde reza: “Y de la manera que está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio.”
No hay hombre que se salve de esto (Romanos
2:11), así sea ateo, judío, islamita, budista, satánico agnóstico, súper
religioso, etc. Dios no hace acepción de persona en este sentido por lo cual todos
tendremos que compadecer ante el rey del universo nuestro señor Jesucristo para
escuchar lo que se no va a imputar, y oír de primera mano el veredicto el cual
solo tiene dos dictámenes, el primero el infierno o el segundo el cielo. Sabemos
también por lo que dice Mateo 7:13 que la gran mayoría de los seres humanos se irán
a pasar la eternidad en el infierno, debido a que una gran mayoría hoy y
siempre rechazaron a Dios o simplemente medio simpatizaron con Él, que es lo
mismo.
Hoy vemos como la corrupción se ha adueñado tanto de las entidades gubernamentales como de las empresas privadas. Parece inverosímil, pero hoy la prosperidad económica está más en las manos de los que practican corrupción que en las personas que son honestas y de vidas decorosas.
Está tan dañada la mente del ser humano que los políticos de nuestros tiempos siempre van pensando en robar para enriquecerse y si no se comprometen con esto, sencillamente no ocupan la curul o el cargo al cual aspiran. Pero el gran problema del ser humano es que no se acuerda que su vida terminara en un juicio. La biblia proclama esta verdad en Hebreos 9:27 donde reza: “Y de la manera que está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio.”
Pero ¿Qué cosas vamos a oír en ese juicio? Como
todo juicio se expondrán nuestras acciones, en especial nuestros secretos, la
biblia nos enseña que en ese día Dios juzgará por Jesucristo los secretos de
los hombres, conforme a su evangelio. Esto indica que en esa corte saldrá todos
nuestros pecados a flote, y se contrastaran con todos los designios de Dios que
hoy conocemos en su palabra. Pienso que
este será un juicio donde estarán toda la corte celestial que acompañara al
señor en esto.
Por otra parte, hay que decir que para las personas
que irán al cielo habrá una gran diferencia en este juicio con respecto a las
que se condenaran, y es que tendrán un abogado que los defenderá y es nada
menos y nada más que el mismo Señor Jesucristo (1 Juan 2:1). Recalcando puedo
decir que todos los escogidos del señor pasaran por allí, pero la diferencia es
que Cristo saldrá adelante y proclamara que nuestro castigo ya fue pagado
completamente por Él en la cruz y por ende podremos acceder a la vida eterna en
el cielo.
Para terminar puedo decir que aunque la salvación
no es por obras, todo ser humano tiene que saber que sus acciones son vistas
por Dios en tiempo real (Proverbios 15:3), las cuales para los condenados será la
causa de su condena, pues la paga del pecado es la muerte (Romanos 6:23) y para
los salvos será la evidencia de que su entrada al cielo no fue por sus obras, pues ninguna agrado a Dios (Isaías 64:6) sino por la gracia de Dios en Cristo Jesús (Efesios 2:8-9).
Que Dios le
bendiga.
Nelson Vergara