Alguien dijo que en la viña del Señor se encontrara de todo un poco, pero ¿Realmente puede existir una persona multimillonaria que sea un fiel seguidor del Señor? Acaso no dijo Cristo que le era más fácil a un camello pasar por el ojo de una aguja que a un rico entrar en el reino de Dios (Marcos 10:25).
Durante mucho tiempo he creído que uno de los enemigos más terrible que tiene Dios es el Dinero, porque el poder de atracción que tiene este es demasiado grande. El dinero no solo corrompe al ser humano, sino que lo aleja de Dios, muchos piensan que pueden amar al dinero y a Dios, pero es bastante complejo esta mezcla de amor.
La biblia nos enseña en Mateo 6:24 que: “Nadie puede servir a dos señores; porque o aborrecerá a uno y amará al otro, o se apegará a uno y despreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas”.
Otro pasaje bíblico que nos presenta el conflicto que se presenta entre un hombre millonario y el evangelio de Cristo es el del joven rico que se entristece en Marcos 10:17-30 el cual relata lo siguiente:
“Cuando Jesús salía para irse, vino un hombre corriendo, y arrodillándose delante de Él, Le preguntó: Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna? Jesús le respondió: ¿Por qué Me llamas bueno? Nadie es bueno, sino sólo uno, Dios. Tú sabes los mandamientos: ‘No mates, no cometas adulterio, no hurtes, no des falso testimonio, no defraudes, honra a tu padre y a tu madre.’ Maestro, todo esto lo he guardado desde mi juventud,” dijo el hombre. Jesús, mirándolo, lo amó y le dijo: Una cosa te falta: ve y vende cuanto tienes y da a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; entonces vienes y Me sigues. Pero él, afligido por estas palabras, se fue triste, porque era dueño de muchos bienes”
Aunque no existe un mandamiento que diga: “Se prohíbe a los ricos entrar al reino de Dios” creo en lo personal que si es bastante complejo y difícil que una persona rica o multimillonaria pueda seguir al Señor Jesucristo. Pero tenemos que también recordar que el creer no es por impulso o motivación humana, el creer depende del mismo Dios y si este escogió desde antes de la creación del mundo a un hombre al cual también predestino para ser multimillonario indefectiblemente este existirá sobre la faz de la tierra.
Dios es soberano y actúa como el desea, y convencerá del Evangelio de Cristo mediante el poder de su Espíritu Santo a todo multimillonario que él tenga incluido en su pueblo. Ahora lo cierto es que todo multimillonario que confiese creer en Cristo también tendrá que reconocer estos cinco “Que” los cuales describo a continuación.
- Que es salvo por la obra de Cristo en la cruz.
- Que ante Dios él es un insignificante e inmundo ser humano que Dios limpio con la sangre de Cristo en la cruz.
- Que sus riquezas no son de él sino del Señor y por ende deben estar al servicio de la obra de Dios.
- Que su necesidad de Dios es tal, que necesita encontrarse con Él a diario mediante la oración y el estudio de su palabra.
- Que deberá ser parte de un cuerpo de personas creyentes (Iglesia) con el cual necesitara reunirse por lo menos el primer día de cada semana y que responderá en cierto grado con lo que este grupo haga para expandir el reino de Dios en este mundo.
Para concluir solo me queda decir que para una persona millonaria ser parte de la obra de Cristo es algo complejo, por lo cual serán escasos los casos, pero como dicen de las brujas “De que los hay los hay”.
Que Dios le bendiga
Nelson Vergara